Ya sabemos que el hablar inglés se ha vuelto una herramienta indispensable para que se nos abran muchas puertas en el ámbito laboral, pero no nos quedemos ahí, el viajar para aprender un segundo idioma es lo que de verdad nos cambia la vida.
A muchos nos pasa y de formas diferentes, para unos puede ser más notable y para otros no tanto; pero algo si es muy claro, cambiamos para mejor.
“Viajar es un ejercicio con consecuencias fatales para los prejuicios, la intolerancia y la estrechez de mente”. Mark Twain.
Lo primero y lo último que aprendes en un viaje es a entender que las culturas son muy diferentes entre sí.
Al principio porque es muy claro que con lo que te encuentras no es a lo que estás acostumbrado, te das cuenta de la gran cantidad de cosas que nos diferencian unos de otros.
Idioma, comida, características físicas, cómo se comportan, qué hacen y que dejaron de hacer.
Pero al final también te das cuenta de las cosas en las que nos parecemos,que compartimos y que nos hace humanos.
Esas diferencias de culturas van a hacer que cambies, así como dicen, “a donde vayas haz lo que veas”, eso solo aplica para las cosas buenas vale aclarar.
Si tienes la oportunidad de viajar a un país más desarrollado por favor absorbe toda esa cultura de respeto por las normas, por el cuidado de su espacio y la educación.
Por el contrario si viajas a un lugar un poco más remoto, aprende de cómo disfrutan de las cosas sencillas, como el valor real para ellos están en las cosas más básicas para nosotros. Esto te va a dar las herramientas en tu vida para ser una persona que aprecia cada cosa que le sucede en su vida.
El sentirte un poco perdido al llegar a un país nuevo es normal, incluso más si no manejas el inglés, puedes llegar a sentirte un tanto incómodo cuando tratas de hacerte entender por señas y gestos, pero esto es parte de la experiencia; tal vez no te des cuenta en el momento pero todo esto te va dando algo que todas las personas en el mundo deberíamos tener, humildad.
Nunca te sientas inferior, no es a lo que me refiero, sino al dejar de lado el orgullo y el lucir bien. Esto dejará ver ante los ojos de los demás la calidad de persona que eres.
Y el medio, es un plus de viajar. Como viajero sabes que un recurso importante es el dinero, así que debes darle un uso adecuado.
Algunas personas que vivimos una experiencia de viaje por largo tiempo tendemos a perder un poco de peso, no porque no comamos nada sino porque no podemos estar comiendo todo lo que
veamos.
La hora del desayuno permanece siempre en la mañana, esta no cambia, pero el almuerzo y la cena pasan a ser únicamente cuando tengamos hambre.
El comer a deshoras harán que tu cuerpo al principio se sienta confundido pero cuando se adapte verás que irás disminuyendo peso gracias a esto y a las grandes caminatas que empezarás a hacer.